Ciudad
de México, febrero de 2018
Ishiguro:
el arte de la sutileza
Título en inglés: The remains
of the day
Título en español: Los restos
del día
Autor: Kazuo Ishiguro
Edición: Primera edición,
octubre 1990.
La novela consta de un prólogo
y seis capítulos que corresponden a las etapas de un recorrido que hace el
protagonista por el oeste de Inglaterra.
El recientemente laureado
Premio Nobel 2017 Kazuo Ishiguro (Nagasaki, 1954), nacido japonés, pero
nacionalizado británico en 1982, nos ofrece una obra escrita en inglés no muy
extensa, son apenas siete novelas las que ha publicado a lo largo de su vida,
pero de una calidad extraordinaria.
La novela que me ocupa, fue
premiada con el prestigioso premio Man Booker (1989) y llevada exitosamente al
cine bajo la dirección de James Ivory y la actuación de Anthony Hopkins y Emma
Thompson en 1993. Cabe mencionar que otras obras del autor, pero del 2003 “La
canción más triste del mundo”, del 2005 “Nunca me abandones” y “La condesa
blanca” (mismo año) fueron también llevadas al cine, aunque no tuvieron la
misma aceptación por el público.
En la obra que me ocupa el
personaje principal Mister Stevens, mayordomo de la mansión conocida como
Darlington Hall, propiedad de lord Darlington y después de Mister Farraday, un
norteamericano adinerado, hace un recuento de sus largos años de servicio
aprovechando unas breves vacaciones que toma por el oeste de Inglaterra.
En su recuento de hechos las
relaciones más importantes del personaje giran en torno a lord Darlington y a
los intentos de éste último de hacer que los aliados vencedores de la Primera
Guerra adopten una nueva actitud ante las gravosas reparaciones de guerra que
tiene que hacer Alemania y posteriormente, previo a la Segunda Guerra, acepten
el ascenso del nazismo y de su principal líder como interlocutores confiables
en Europa.
En un ámbito más personal, el
personaje principal toca la relación laboral y amistosa que establece con el
ama de llaves de la casa Miss Kenton, en la cual se deja entrever una cierta
atracción entre ambos, aunque la misma es rápidamente reprimida por el carácter
severo del mayordomo que debe comportarse siempre como tal. Esta actitud
llevará a Miss Kenton a dejar la casa cuando conoce a otro hombre que le ofrece
matrimonio.
En la novela el mayordomo
narrador destacada como rasgo principal de su perfil laboral la “dignidad”, que
en su concepción corresponde a la capacidad de ser fiel a la profesión que
representa o en otras palabras saber hacer su trabajo (algo que se extraña en
muchos profesionistas de hoy en día); en contraste, señala que para un
caballero como lord Darlington los rasgos más importantes son la “talla moral”
y su deseo de “justicia”, los cuales resultan explicativos del comportamiento
que en vida ha observado su patrón. Por otro lado, la lealtad, según el mismo
personaje, sólo debe darse cuando el empleado esté convencido de haber
realizado una elección inteligente de patrón, donde los elementos a destacar
tomen en cuenta principalmente la honradez y la sensatez. Por desgracia, se
trata de dos elementos escasos en el mundo que nos tocó vivir.
La capacidad de observación
del principal narrador resulta a todas luces extraordinaria para conocer el
ambiente, los personajes y sus comportamientos en el desarrollo de los eventos.
El narrador tiene sentimientos reprimidos y palabras no pronunciadas, pero en
muchos casos ello sólo lo intuye el lector, ya que él nunca lo revela, quizás
como resultado de su educación como mayordomo.
El mayordomo, por fin, deja un
momento de regresar al pasado, que ahora su desempeño comienza a mostrar fallas
y que es necesario aceptarlo, no deprimirse y disfrutar el momento: “Después de
todo, ¿qué se gana con estar mirando siempre atrás? ¿Con culparnos del hecho de
que la vida no nos haya llevado por el camino que deseábamos?...¿Para qué preocuparnos
tanto por lo que deberíamos haber hecho o dejado de hacer para dirigir el curso
que tomaban nuestras vidas?..”.
Finalmente, el personaje
acepta que “…la verdad es que basta con que intentemos al menos aportar nuestro
granito de arena para conseguir algo noble y sincero…los que estamos dispuestos
a sacrificar una gran parte de nuestras vidas para lograr estas aspiraciones,
debemos considerar el hecho en sí motivo de satisfacción y orgullo, cualquiera que
sea el resultado.”
En la novela el autor nos
revela se capacidad para destacar los rasgos sicológicos del personaje
principal, el uso magistral que tiene del lenguaje, su habilidad para el manejo
de situaciones y la elaborada sutileza con que hacen sus planteamientos los
principales actores de la narración en particular el personaje principal.
El escritor acompaña su
narrativa de diálogos directos, descripciones cortas y un lenguaje accesible
que hacen la lectura del texto muy amena.
En general, la obra de Kazuo
Ishiguro provoca entre lectores y críticos comentarios elogiosos por su trabajo
fino, su equilibrio y claridad de comunicación. Después del controvertido Nobel
a Bob Dylan, el premio de 2017 parece tener un consenso más generalizado.
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